Sepa cómo participar
El Ayuno de Daniel se basa en el propósito descrito en la Biblia, en el capítulo 10 del libro de Daniel. Durante 21 días, Daniel decidió ayunar para buscar el favor, la sabiduría y el conocimiento de parte de Dios.
Hoy en día, entre las cosas que más entorpecen nuestra comunión con Dios están las distracciones —cualquier tipo de entretenimiento e información secular que nos bombardean todo el tiempo. El Señor Jesús solía decir “El que tiene oídos para oír, oiga” (Mateo 13:9). Este es exactamente el propósito del Ayuno de Daniel: abrir nuestros oídos a la voz de Dios.
No se engañe al pensar que los 21 días serán muchos, porque, participando o no de este ayuno, esas tres semanas pasarán. Pero los que participen con determinación y sinceridad, terminarán siendo transformados, renovados y bautizados con el Espíritu Santo. Esta es su oportunidad.
Si usted conoce a alguien que dice creer y ser de Dios, pero la vida de dicha persona no muestra a este Dios Vivo y, por lo tanto, su existencia está muerta, apagada, invítela a participar con usted.
